lunes, 17 de septiembre de 2018

INICIO DE CURSO: FORMACIÓN EN EQUIPOS.

INICIANDO EL CURSO.

Estos días de septiembre de 2018, iniciamos el curso con los talleres formativos, tanto para las usuaria como para los/as trabajadores/as. Momento de atracción, el fuego no mengua; al contrario, se acrecienta. Somos centro y camino. Lo desvalido sigue gritando y es apremiante. Nos llama. Debemos afrontar las realidades con ahínco, responsabilidad y criticidad. Somos lugar de esperanza como nos proclama nuestro nombre. Debemos sustentarnos y ampliarnos mutuamente, generar motivaciones, vislumbrar perspectivas y abrir horizontes. Nos requerimos en intensa conciencia de grupo, de equipo para avanzar en camino humanizador. Vamos abriendo camino en la sociedad y en el mundo marginal, desprotegido y herido buscando la integración e inserción digna y autónoma. Ahí están las situaciones trabajosas y humillantes de las que se debate nuestras mujeres tanto en la exclusión social como en la salud mental.
Somos arrojados a las complejidades sociales y humanas.
BIENVENIDAS A TODAS.


Detrás de cada mujer hay una situación crítica



alberto urteaga, de itxaropen gune, apela a la sensibilización social ante las situaciones de vulnerabilidad que detectan
detrás de cada mujer dedicada a la prostitución hay una vida que arrastra una situación crítica. Son mujeres sometidas a una situación de gran vulnerabilidad, asegura Alberto Urteaga Villanueva, gerente de la ONG Itxaropen Gune (Lugar de esperanza). Esta organización dedicada desde hace 14 años a ayudar a personas con situación de vulnerabilidad e indefensión, tiene entre sus acciones destacadas orientar e integrar social y laboralmente a mujeres inmigrantes en situación grave de exclusión social, principalmente a aquellas vinculadas al ejercicio de la prostitución. El pasado mayo firmó un convenio con el Gobierno de Navarra para la gestión de un recurso que facilita la acogida y alojamiento temporal para mujeres supervivientes de la trata con fines de explotación sexual en Navarra.
Las dos plazas de este recurso están ocupadas pero, afirma Urteaga, no es el único que oferta la entidad. Tienen otros pisos, uno con 4 plazas y otro con 3, también ocupados con mujeres en proceso de salir de la prostitución y apunta que si hubiera que habilitar más plazas también lo harían.
Itxaropen Gune cuenta con profesionales y 50 personas voluntarias que acceden a mujeres que trabajan en la prostitución para ayudarles y atender sus necesidades. En el último año llegó hasta cerca de 400 mujeres, contactó con 150 y logró la integración social de 8. La visión de esta ONG de la prostitución en Navarra detecta una evolución en cuanto al origen de estas mujeres. “Hace 14 años, eran mujeres españolas relacionadas con problemas de droga, heroína, principalmente, y con importante presencia de clubes”. Ahora, la actividad la ejercen mujeres extranjeras, principalmente africanas y en concreto nigerianas, seguidas de latinoamericanas. Se ha reducido el número de clubes, han aumentado los pisos donde se ejerce la prostitución, mientras que se mantiene la actividad en la calle, que no aumenta por los riesgos que conlleva”. Estima Urteaga que un 60% de las mujeres son nigerianas, un 30% brasileñas y un 10% se reparten entre las de países del Este y China.
Desde la asociación organizan cursos de formación para estas mujeres con el fin de que puedan salir de este mundo de explotación “siempre desde el máximo respeto”, afirma Urteaga quien asegura que no han tenido problemas con proxenetas. Su acercamiento a las mujeres dedicadas a la prostitución es posible gracias a los servicios sociales, a las trabajadoras sociales, servicios sanitarios y su personal voluntario.
Considera Itxaropen Gune que salvo en fechas concretas, como los Sanfermines, cuando repunta la actividad y llegan más mujeres para trabajar en la prostitución, no ha crecido pese a que llama la atención que haya tantos clubes, pisos y mujeres en la calle en una comunidad tan pequeña. Para Urteaga, la sociedad debe concienciarse de lo que conlleva la prostitución. “El 99,5% de las mujeres que se dedican a la prostitución no lo hacen por interés propio, sino por una necesidad económica acuciante para devolver deudas contraídas para venir, poder atender a sus hijos”. De ahí la llamada de atención a los usuarios. “Son mujeres en una situación de gran vulnerabilidad”.